«Valorant» ya está disponible de forma gratuita para todos los usuarios que quieran descargarlo, sin embargo, al tratarse de un juego de PC no siempre se obtienen los mismos resultados. Y, como se trata de un juego en el que la acción pasa en cuestión de segundos, el rendimiento es clave.
Por eso mismo hoy venimos dispuestos a echaros un cable para que tengáis la mejor experiencia posible jugando a «Valorant».
¿Resolución o Frames?
A la hora de hablar de jugar en mejores condiciones nos referimos, básicamente, a dos variables. La resolución en la que vemos el juego y los Frames por Segundo a los que nuestro ordenador «lo mueve». ¿Cuál es más importante de los dos? Eso depende.
Si se trata de un juego más cinemático, lo suyo sería que primase la resolución. Si por el contrario nos encontramos ante un título de acción, los frames mandan. Aunque, como siempre, lo ideal es que haya un buen balance entre ambos. Porque no sirve de nada jugar a 4K si vemos el juego a tirones. Del mismo modo que tampoco vale de nada tener un gameplay fluidísimo si no distinguimos bien los detalles.
Los ajustes gráficos de «Valorant»
Si quieres jugar de forma cómoda y respetando un mínimo de calidad, lo suyo es que cumplas, al menos, con los requisitos recomendados. Que, dada la buena optimización de RIOT Games son bastante asequibles. Con únicamente 4GB de memoria RAM y una tarjeta gráfica con 1GB de memoria VRAM dedicada podrías jugar.
Por supuesto, estos ajustes serían para jugar a 30 FPS y en resoluciones bajas (720p o 1080p). Lo más recomendable sería contar con al menos 8GB de RAM y una tarjeta con 4GB de VRAM. Es decir, una tarjeta gráfica de gama media como la GTX1050. Aunque siempre cabe la posibilidad de jugar con los ajustes para conseguir la mejor experiencia visual y jugable.
Ya que bajando algunos apartados gráficos como la calidad de los modelos podremos conseguir un mejor rendimiento en «Valorant» sin tener que tocar nuestro PC.
Prueba, prueba y vuelve a probar
No existe una «fórmula mágica» a la hora de hablar de rendimiento. Sobre todo con tantas variables sobre la mesa. Por eso mismo nuestro mejor consejo es que vayas probando diferentes configuraciones. Si encima lo haces con el contador de frames que tiene el juego activo, mucho mejor.
Ya que de esta forma sabrás cuántos FPS consigues con cada configuración y con cada resolución. Tras unas cuartas partidas, lo más probable es que ya tengas claro como conseguir los mejores resultados. En ese aspecto, nuestro consejo personal es que intentes llegar a los 60 FPS en todo momento.
Es decir, de nada sirve que al principio tengas 60 (o más) FPS si en mitad de la acción esa cifra baja y el juego te da tirones. Una cifra más alta siempre va a ser mejor, pero la diferencia no es exagerada, por lo que no deberías preocuparte.